La propuesta busca orientar el máximo número de viviendas posible hacia el sur y hacia las vistas al Mar de Alborán situándose en la zona alta de la parcela. Mediante una cuidada ubicación y unas piezas edificadas más compactas, se ha conseguido situar 4 bloques con un total de 60 viviendas (50% del total) en la zona más elevada con orientación predominantemente sur con vistas al mar, y con sus fachadas de día, terrazas y salones bien soleados.
 

El resto del techo edificable residencial se ha distribuido buscando el otro gran atractivo de la parcela, las vistas hacia el campo de golf. En la parte baja de la parcela orientados hacia el noreste se ubican dos bloques largos que agotan la edificabilidad restante, con unos volúmenes que buscan la máxima adaptación posible a la topografía, así como crear amplios espacios ajardinados entre los bloques de la parte baja y la parte alta del emplazamiento.